The Diazpez Team
Asumo el riesgo de ser repetitivo, y vuelvo a decir que cuando este proyecto empezó, no tenía la menor idea de hacia dónde iba a ir. Adónde me iba a llevar. Mientras escribo estas líneas, sigo sin saberlo.
Hoy a la mañana, mientras terminaba de organizar las notas que estaba escribiendo para AirlineGeeks, me encuentro un mail del Editor en Jefe. En el medio de un montón de conceptos que no merezco, me propuso algo. Y si bien me tomé unos minutos, seguí al pie de la letra lo que me indicó la tripa en los primeros dos segundos desde que lo leí.
Me incorporé al equipo de AG en septiembre de 2017. Y en el mail me cuentan que, a partir del impacto de las noticias que la región está generando (la que con una relajante honestidad el equipo de AirlineGeeks reconoció conocer poco) y del tráfico que generó el interés por saber más de la aviación Latinoamericana, el management del sitio decidió crear una nueva división: AirlineGeeks South America. En esa división a formar, se me ofreció el rol de South America Writing Team Lead, que acepté con mucho honor y orgullo.
En las próximas semanas tendré a mi cargo el reclutamiento, la selección y la inducción de un equipo de escritores que pueda generar contenido sobre la región. También seleccionaremos a uno o dos spotters que quieran aportar contenido gráfico de aviones, líneas aéreas e infraestructura en general.
Iré agregando detalles a medida que vayamos avanzando en la coordinación de las búsquedas, y el proceso de entrevistas. Lo clave: saber Inglés, saber de aviación, tener ganas de sumar experiencia. Si tenés la tercera al 100%, el porcentaje de las otras dos no es tan importante. Lo iremos viendo.
Déjenme ser claro desde un principio: no es remunerado. No quiero que haya confusiones al respecto. Es un muy buen punto de partida para quien quiera ir empezando a recorrer este camino. Hoy, a esta hora, en este momento no puedo prometer algo que no puedo cumplir. Más adelante, Dios dirá. Necesito ser claro para que no se malinterprete: yo tampoco me llevo un solo peso/dólar/patacón/franco Suizo/bitcoin. El Dios dirá, también me incluye.
Les soy completamente honesto: cuando arranqué con esto, en marzo de 2017, ni se me cruzaba por la cabeza que fuera más que un pasatiempo. Pero hoy, aún cuando todavía no genera ingresos, no puedo imaginarme muy lejos de este camino para el resto de mi vida profesional, y más allá. Y todo, porque un día le di bola a la pasión. Y elegí la mesa equivocada (que ahora sé que fue la correcta) en un casamiento.
Sé lo que quiero ser, sé adonde quiero ir. Sé también, cómo quiero llegar ahí. Y como no quiero llegar. Sé que las oportunidades llegan cuando le ponés garra a tu pasión. Cuando implica noches de poco sueño, cuando le terminás sacando tiempo a tu familia. Cuando hacés malabares con el laburo que te paga las cuentas. Pero también sé que una vez que escuchaste esa voz que tenés adentro, una vez que la escuchaste bien bien y le diste pelota, el miedo se te va. Y no podés dejar de escucharla. Una vez que escuchaste a la pasión, ya no tenés alternativa.
Con respecto a este blog, que es el inicio de todo, sigue siendo el centro. Sigue siendo el lugar donde nos juntamos a charlar, a debatir, a aprender todos juntos. No se pierde, no se transforma. Acá es donde quiero venir siempre. A esta mesa, con estos amigos, a tomar este café, o esta cerveza, o este whiskey. El Blog de Diazpez sigue y seguirá siendo el lugar de Diazpez. A Pablo, al pichón de periodista especializado, lo invitamos cada tanto.
Nunca me voy a cansar de agradecerles. Siempre me pareció una frase vacía y estúpida, pero es absolutamente real. Si del otro lado no hay nadie, esto no tiene sentido. Y agradezco a todos los que están, los que van llegando y los que llegarán. Agradezco a los amigos que este camino me empieza a dejar. Los llevo siempre en el corazón, me da orgullo saber que hay gente que lee lo que escribo. No es vanidad. Es sincero orgullo. En un punto, hasta es aterrador, y está bien. Que la gente quiera escuchar lo que uno tiene para decir es, ante todo, una responsabilidad. Merece respeto. Merece el mejor esfuerzo.
Mientras escribo esto, va cayendo la noche en casa. Y me sonrío, como un gil, mientras les cuento este pequeño gran paso. Cuáles serán los próximos pasos en esta locura de proyecto de vida y de carrera? Ni puta idea. Pero qué flash va a ser descubrirlo.