La RAAF pone a prueba al MQ-28 Ghost Bat en condiciones de combate
El UCAV australiano Ghost Bat sale del entorno de pruebas y enfrenta su primera operación real.
En un nuevo paso hacia su integración operativa, el vehículo aéreo de combate no tripulado (UCAV) MQ-28A Ghost Bat fue desplegado por primera vez en una base aérea de la Real Fuerza Aérea Australiana (RAAF) en plena capacidad de combate. El hito tuvo lugar en la RAAF Base Tindal, en el Territorio del Norte, como parte del ejercicio Carlsbad, consolidando el avance del programa en su transición de desarrollo a operación real.
La actividad marcó el debut del Ghost Bat fuera de un entorno de pruebas controlado. Según informó Boeing Defence Australia, el despliegue fue diseñado para validar la capacidad del sistema para operar desde locaciones desconocidas y bajo condiciones típicas de un teatro de operaciones. Las operaciones incluyeron el transporte del MQ-28 en un C-17 Globemaster III, el establecimiento rápido de una célula operativa en la base, la ejecución de misiones de vuelo y su posterior redepliegue, todo dentro de un plazo de siete días.
“El MQ-28 está alcanzando un nivel de madurez que nos permite demostrar su utilidad en escenarios operativos variados”, señaló Glen Ferguson, director global del programa MQ-28 en Boeing Defence Australia. “Esta prueba representa un sólido paso adelante en la demostración de la capacidad de despliegue expedito y operación en conjunto con otros activos tripulados de la RAAF”.
El ejercicio Carlsbad también sirvió como escenario para afianzar los procedimientos de interacción entre el Ghost Bat y distintas unidades de la Fuerza de Defensa Australiana, en línea con los objetivos de integración del sistema en el mix de fuerzas de combate del país.

Una fotografía difundida por Boeing muestra a un MQ-28A Ghost Bat en plataforma junto a un caza F-35A Lightning II que retorna de una misión, ilustrando el futuro escenario de operaciones combinadas entre aeronaves tripuladas y no tripuladas.
La evolución del Loyal Wingman
El MQ-28 Ghost Bat es el resultado del programa Loyal Wingman iniciado en 2017 por Boeing Defence Australia en conjunto con la RAAF. Concebido como un multiplicador de fuerzas de bajo costo relativo, el sistema busca acompañar a cazas tripulados en operaciones de combate, asumiendo misiones de alto riesgo en entornos disputados gracias a su diseño furtivo y capacidades autónomas.
Con una longitud de 11,7 metros y un alcance superior a las 2.000 millas náuticas (3.700 km), el Ghost Bat puede integrar diversos paquetes de sensores, abarcando desde inteligencia, vigilancia y reconocimiento (ISR) hasta alerta temprana táctica.

Además de sus avances operativos, el programa MQ-28 representa un hito industrial para Australia. La producción en serie se llevará a cabo en la nueva planta que Boeing está construyendo en Toowoomba, Queensland, la primera instalación de ensamblaje final de aeronaves militares de la compañía fuera de América del Norte.
Con el despliegue en Tindal, Boeing y la RAAF refuerzan su apuesta por el desarrollo de capacidades soberanas y por el papel central que los sistemas no tripulados jugarán en el futuro de la aviación de combate australiana.
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