La investigación del B787 de Air India apunta a una falla de potencia y analiza un caso de combustible contaminado
Pesquisas sobre el accidente del vuelo AI-171 en Ahmedabad se enfocan en una falla eléctrica y trazan paralelos con un incidente de 2020 en Gatwick.
La investigación sobre el accidente del Boeing 787 Dreamliner de Air India, ocurrido el pasado 12 de junio, avanza con un fuerte enfoque en una falla de potencia catastrófica ocurrida segundos después del despegue. Los equipos, liderados por la Oficina de Investigación de Accidentes de Aeronaves de la India (AAIB India), analizan la posibilidad de que el combustible estuviera contaminado, una hipótesis que rememora un evento similar ocurrido en el Reino Unido en 2020.
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El vuelo AI-171, con matrícula VT-ANB, cubría la ruta entre Ahmedabad y Londres-Gatwick. Los investigadores de la AAIB del Reino Unido, que también se encuentran en el lugar del siniestro, examinan los registros técnicos de la aeronave correspondientes a las 24 horas previas al vuelo.
Un oficial con conocimiento del proceso de investigación declaró al The Indian Express que la observación visual de los restos dejaba claro que el avión sufrió una pérdida de potencia. Basados en la evidencia material disponible, que incluye fragmentos de la aeronave y videos del despegue, así como testimonios de los controladores aéreos, los expertos estiman que el Boeing 787 experimentó una falla en su sistema eléctrico principal momentos después de dejar la pista.
La pesquisa traza un paralelo con un incidente del 6 de marzo de 2020, cuando un Airbus A321 de Titan Airways sufrió una doble falla de motor justo después de despegar de Londres-Gatwick. En esa ocasión, la investigación de la AAIB (informe oficial) concluyó que la causa fue una contaminación del queroseno con polímeros superabsorbentes.
¿Qué es la Turbina de Aire de Impacto (RAT)?
La Turbina de Aire de Impacto (RAT) es una pequeña hélice que se despliega automáticamente en una aeronave si se produce una pérdida total de la potencia eléctrica principal. Al girar por la fuerza del viento relativo, genera energía eléctrica o hidráulica de emergencia para alimentar sistemas de vuelo críticos, como los controles y las pantallas esenciales, permitiendo al piloto mantener el control de la aeronave.
Una fuente oficial cercana a la investigación del AI-171 explicó que "las evidencias materiales, que incluyen los restos y los videos del despegue, así como del accidente, indican una falla de energía definitiva en el vuelo". Si bien la causa precisa solo se conocerá tras el análisis de las grabadoras de vuelo (cajas negras), la hipótesis principal se consolida.
La misma fuente añadió que se puede estimar que, "como el vuelo estaba en despegue y su nariz se inclinaba hacia arriba para la sustentación, el accionamiento de la Turbina de Aire de Impacto (RAT) no pudo ayudar al vuelo a realizar un retorno seguro, ya que todavía no alcanzaba la altitud mínima de 3.600 pies para una trayectoria de vuelo segura". Esta altitud es considerada un margen de seguridad para realizar maniobras complejas de retorno al aeropuerto. A baja velocidad y altitud, la RAT no genera suficiente energía para alimentar todos los sistemas necesarios para una recuperación completa.
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Desde 2017, haciendo periodismo aeronáutico. Award-Winning Journalist: Ganador de la edición 2023 de "Periodismo de Altura", otorgado por ALTA. Facts don't care about your feelings.
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