La administración Biden planea vender a Ucrania cuatro aviones no tripulados MQ-1C Gray Eagle, que pueden ser armados con misiles Hellfire.
Según Reuters, la intención de venta habría sido confirmada por tres fuentes bien informadas. La Oficina Oval tiene la intención de notificar al Congreso de la posible venta a Ucrania en los próximos días y se espera un anuncio público después de eso, dijo un funcionario estadounidense.
El Congreso podría bloquear la venta, dijeron las fuentes, y añadieron que también existe el riesgo de un cambio de política de última hora que podría echar por tierra el plan, que ha sido revisado en el Pentágono durante varias semanas.
Buena parte del éxito que vienen cosechando las defensas ucranianas contra las fuerzas invasoras rusas, viene del hecho de que están haciendo un uso intensivo y exitoso de diferentes tipos de drones de diversos tipos y categorías.
Y un sistema que viene cobrando una relevancia creciente durante esta guerra es el Bayraktar TB2 turco, que se está mostrando como un sistema eficiente, versátil y letal, en misiones de reconocimiento e inteligencia, para dirección de fuego de artillería, en ataques directos contra blancos puntuales, e incluso en misiones anti-buque.
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Pero el Gray Eagle representa un salto tecnológico porque puede volar por hasta 25 horas, dependiendo de su misión, y puede recoger enormes cantidades de datos con fines de inteligencia. Además de que también pueden llevar los potentes misiles Hellfire para destruir blancos blindados, situados a más de 8 kms (dependiendo de su trayectoria y envolvente de disparo).
La venta es significativa porque pone por primera vez en el campo de batalla contra Rusia un avanzado sistema reutilizable estadounidense capaz de realizar múltiples ataques profundos.
La formación en el sistema UAV Gray Eagle, fabricado por General Atomics, suele durar meses, pero en las últimas semanas se ha propuesto un plan para preparar a técnicos y operadores ucranianos experimentado, para que puedan hacer uso del drone con solo un puñado de semanas de preparación.
La venta de los misiles Hellfire se llevará a cabo a través de una futura PDA (Presidential Drawdown Authority) por la cual que el Presidente tiene la potestad de autorizar la transferencia inmediata de artículos y servicios de las existencias de los Estados Unidos, sin la necesidad de una autorización del Congreso, una vez que se haya completado el entrenamiento de los operadores ucranianos.
